Talvez o efeito maior do momento neoliberal da longa globalização tenha sido o anátema quase total lançado sobre o valor político da autodeterminação. E talvez o efeito maior da atual crise desse momento seja, em quase todas as regiões do mundo, o retorno a esse valor.
José Manuel Pureza, A autodeterminação, lembram-se?
Sim, lembro-me e, sinceramente, tenho saudades desses tempos.
ResponderEliminarNeste preverso Século XXI, liberdade, democracia, autodeterminação são-nos apresentados como anacronismos a serem metidos no baú da História.
Mas é como taparmos uma torneira com a mão, após algum tempo a pressão é de tal ordem que temos de ceder e deixar a água jorrar a rodos.
"...Unir os povos do Sul da Europa para resgatar a nossa autodeterminação contra o constitu- cionalismo global ordoliberal que nos amarfanha é hoje um imperativo da democracia. Essa é a questão essencial das próximas eleições europeias."
ResponderEliminarAntes, eu proporia...
Unir os activistas de Esquerda, para resgatar a nossa autodeterminação contra
o global
(…no mundo… ou na Europa !!! )
que nos amarfanha,
é hoje um imperativo, para resgatar a Democracia!
Essa, é a questão essencial á discussão nos partidos, na construção da alternativa de Esquerda.
Bom, embora o meu voto vá sempre para a esquerda, acho que numa emergência nacional como a actual, o importante é sair do Euro custe o que custar. Colar essa saída å
ResponderEliminaresquerda é um erro pois isso só servirá para colar a direita à defesa do Euro.
Estamos em estado de guerr
a e, numa guerra, todos os aliados são bem vindos.
Vicenç Navarro, ¿Es otra Europa posible?
ResponderEliminar3/1/14
«Pero la cosa es incluso peor, pues aun suponiendo que la Comisión fuera de izquierdas, es poco lo que podría hacer, pues tiene que aplicar el Tratado de Lisboa, que es la Biblia neoliberal que marca la pauta y que no puede cambiarse. Y ahí está el meollo de la cuestión que explica mi sorpresa de que haya hoy partidos de izquierda que todavía crean que el sistema de gobierno y los tratados que rigen la UE permitirían alcanzar un sistema federal, de carácter social y democrático. Y estoy pensando cuando digo esto en los partidos a la izquierda de la socialdemocracia. Creerse, como Syriza en Grecia cree, que podemos cambiar la Unión Europea me parece una enorme ingenuidad. Es lo que en inglés se llama “wishful thinking”. Las coordenadas del poder están muy bien diseñadas. Los diseñadores de la UE y de su moneda lo hicieron pero que muy bien. Y es imposible cambiar este sistema que está desmontando la Europa social. De ahí que las izquierdas estén perdiendo mucho tiempo. Hoy, la situación es intolerable. Las agencias más creíbles pronostican que España no habrá eliminado el desempleo creado tras el estallido de la crisis hasta dentro de veinte años (repito, veinte años). Continuar las políticas actuales es un suicidio para las clases populares.
Las izquierdas deberían plantearse salirse del euro, como medida de presión para cambiar las políticas de austeridad, y salirse del euro en caso de que estas políticas continuaran haciéndose. El que no lo hagan es porque todavía están estancadas en aquella imagen de la Europa social y democrática que siempre soñaron (pero que hoy está desapareciendo muy rápidamente). Así de claro.»